¿Te acuerdas de Francisco Pagaza?

- Cuentan que él fue quien trajo al País Vasco a Frederick Beaconsfield Pentland, más conocido como "Mr. Pentland" y quien dirigió exitosamente al Athletic de Bilbao en sus primeros pasos por la Liga Española. Con él coincidió en su etapa como jugador del Racing de Santander, donde estuvo en dos etapas diferentes además de jugar para Gimnàstica de Torrelavega, Racing de Madrid, Atlético y Arenas Club de Getxo.

Francisco Pagazaurtundua González-Murrietaizo, conocido deportivamente como "Pagaza", hizo historia con el equipo getxotarra, con el que conquistó la única Copa del Rey que figura en la historia del club de Gobela al lado de los Sesúmaga, Careaga, Vallana, Ibaibarriaga y José María Peña.
Hijo de Emiliano Pagazaurtundua, un importante arquitecto municipal y una profesora de piano, el también llamado "Paquiro" fue uno de los mejores futbolistas que se recuerdan de la España de los primeros años del siglo XIX, en la que también se triunfaron jugadores como Ricardo Zamora, Pichichi, Gamborena y Lakatos entre otros.

Internacional por España, de los primeros, era hermano de otro gran deportista con idéntico nombre al de su progenitor que jugó en el Sestao. Y es que la familia Pagazaurtundua eran de la margen izquierda vizcaína. Francisco nació en la localidad sardinera de Santurtzi 30 de octubre de 1894.

Pagaza empezaría a jugar al fútbol en su colegio de Orduña, de donde pasaría a cursar sus estudios en Inglaterra. Allí se rodeó de expertos en el balompié y continuó jugando hasta que retornó al País Vasco para iniciar su trayectoria deportiva en el Arenas Club de Getxo.
Casi como uno de los pioneros del equipo arenista, este extremo derecho comenzaría a jugar campeonatos de forma amateur, ya que el fútbol profesional no se estilaría hasta finales de la década de los años veinte, justo cuando el santurtziarra ya habría dejado el fútbol como jugador.

Con el Arenas conquistaría el Campeonato Regional y se plantaría en la final de la Copa del Rey Alfonso XIII en 1919, donde aguardaba el Barcelona para medirse en una dura contienda en el Martínez Campos (Madrid) que acabaría con victoria vizcaína por 5-2. El Arenas se proclamaría campeón de Copa por primera y única vez en su dilatada historia.

En la entidad de Jolaseta estaría hasta 1920, después de haber tenido también una breve etapa como jugador del Atlético de Madrid. Se marcharía del equipo rojinegro como una leyenda para dar sus primeros pasos con la recién creada selección española, en la que coincidiría con otros grandes futbolistas como Ramón Equiazábal, Artola, Patricio Arabolaza, Zamora, Samitier y Pichichi entre otras leyendas.
Acució con el combinado español a los Juegos Olímpicos de Amberes 1920, formando en la primera alineación del equipo español en su extensa vida internacional. En tierras neerlandesas, aquellos mitos de los años veinte se trajeron la medalla de plata.

Con una experiencia internacional de siete partidos, el gran Pagaza seguiría jugando al fútbol como miembro del Racing de Santander. Se trasladó a Cantabria para trabajar en el astillero naval de Santander, que fue lo que motivó su fichaje por la entidad deportiva de El Sardinero.

Para el Racing santanderino jugaría varios años, interrumpidos estos por una breve etapa como jugador de la cercana Gimnástica Torrelavega, en la que estuvo durante la campaña 1923\24. Retornaría al equipo sardinero para jugar tres años más a las órdenes de Pentland, a quien Francisco había convencido para venir a España en el comienzo de los años veinte.
El punta santurtziarra continuó jugando al fútbol compitiendo en torneos regionales y otros eventos, ya que no tendría tiempo para conocer la nueva Liga Española, idea gestada por la Federación en 1928 que echaría a andar a partir de 1929, con Pagaza ya retirado.

Partido del Racing de Santander en el que vemos a Pagaza a la izquierda de la imagen.

- Había jugado sus últimos partidos como jugador del Racing Club de Madrid, con el que colgó las botas en 1928 para después emprender una nueva carrera como entrenador. Francisco Pagaza se haría cargo de clubes como el Osasuna, Sporting de Gijón, Mallorca, Hércules y Racing de Santander, ese equipo al que representó en dos diferentes etapas de su vida, como hizo con su amado Arenas de Getxo.

A partir de 1946 se apartaría definitivamente del mundo del balompié, falleciendo en Madrid el 18 de noviembre de 1958. Cabe destacar el título que consiguió con la selección Regional del Norte, la Copa del Príncipe de Asturias, así como su paso por la recién creada selección cántabra.