La Copa del Arenas de Getxo.

- El Arenas Club, ese equipo tan temido en los albores del fútbol español que nació el 7 de mayo de 1910 bajo el nombre de "Arenas Foot-ball Club", para después evolucionar y pasar a denominarse "Arenas Club de Getxo". Fue fundado por la insistencia de jóvenes estudiantes de la alta burguesía de Las Arenas y Neguri bajo la influencia de los ingleses, donde muchos de ellos cursaron sus estudios.

Tras dar sus primeros pasos por competiciones regionales, el equipo de colores rojinegros empezaría a competir a nivel nacional gracias a la existencia de la Copa del Rey, que acogería los mejores duelos del fútbol español desde el mes de abril de 1903.
En su decimoséptima edición, el torneo nacional contaría con un nuevo campeón, con una escuadra compuesta por buenos futbolistas que harían historia para el fútbol vasco. Equipos como el Athletic de Bilbao, Real Unión de Irún y Real Sociedad -bajo el nombre de Club Ciclista de San Sebastián-, habían dominado el panorama copero hasta que entre ellos se coló el Arenas de Getxo.

En aquella plantilla sin entrenador se hallaban futbolistas como Félix Sesumaga, el meta Jáuregui, Domingo Careaga, Francisco Pagaza, José María Peña, Florencio, Barturen, Ibaibarriaga, José Arruza, Uriarte y un Pedro Vallana que solía ejercer como entrenador y capitán del equipo.

Las fases decisivas de aquella Copa del Rey 1919 contarían con varias sorpresas que se habían ganado el derecho a participar en el llamado "torneo del K.O.". El Arenas, Racing de Madrid y el Águilas murciano se plantarían en la ronda de cuartos hallando la clasificación en sus respectivos campeonatos regionales. Los cuartos de final se disputarían entre los meses de marzo y abril.
A la entidad de Getxo le tocaría medirse al Racing madrileño, que saldría de Jolaseta con una goleada por 8-2 para sentenciar el pase a la siguiente ronda por parte de los vascos. El partido de vuelta se saldaría con empate a cero en el Estadio del Paseo Martínez Campos.

Ya en semifinales, al Arenas le tocaría enfrentarse al Vigo Sporting, club del que años más tarde nacería el R.C. Celta en su fusión con el Fortuna. La escuadra vizcaína se mostraría muy superior, tanto en la ida como en la vuelta. Con 6-1 en Las Arenas y 0-2 en el campo de Coia (Vigo), la afición rojinegra celebraría la clasificación para la final de la Copa del Rey Alfonso XIII.

El último escollo para el Arenas sería el Barça de los Agusín Sancho, Lakatos, Garchitorena y Paulino Alcántara. La final se celebraría el 18 de mayo de 1919 en el Martínez Campos, con un lleno de aficionados ante la mirada del ilustre colegiado Julián Ruete.
Cuentan los medios de la época que la final fue vibrante, muy disputada. Ambos conjuntos deleitaron al espectador con jugadas de ida y vuelta y muchos goles, siendo el primero en golpera el arenista Sesúmaga, quien acabaría siendo el máximo goleador del partido. Viñals empataría la contienda antes de irse al descanso, retirándose ambas escuadras con empate a uno.

La segunda parte fue una auténtica locura. Después de adelantar a los suyos Lakatos, el partido se volvió intenso con varias ocasiones de los vascos, que a falta de diez minutos para la conclusión del encuentro empatarían por medio de Sesúmaga, tanto que dejaría tocados a los catalanes.

Por tanto, el último duelo copero tendría que resolverse en el tiempo de prórroga, en el que se pudo notar más frescura por parte de los rojinegros. Éstos pasarían por encima de los barcelonistas con el hat-trick de Sesúmaga y los goles de sus compañeros Florencio Peña e Ibaibarriaga, que sentenciaría el partido con un 5-2 a favor del Arenas de Getxo, flamante campeón de la Copa del Rey 1919.

Vista del Martínez Campos en la final de Copa de 1919 (Madrid, foto de mesqueunclub.gr).

- La historia narra que se impuso el mejor, ante un gran Barça que hoy en día copa la clasificación de "Rey de Reyes". Para el club getxotarra sería su primer y único alirón de Copa, algo que no se volvería a repetir en la historia del fútbol español desde aquella mágica tarde del 18 de mayo.

El Barcelona pudo tomarse su venganza seis años después, venciendo en una nueva final a los "areneros", que en la semifinal se habían deshecho del Celta de Vigo. En 1927 jugarían su última final, ante un Real Unión que se impondría por 1-0 en la prórroga. Aún así, pocos son los clubes que pueden presumir de una Copa del Rey en su palmarés. El Arenas lo hace desde 1919.