lunes, 1 de abril de 2019

¿Te acuerdas de Pedro Vallana?



- Él vio nacer al Arenas de Getxo y fue uno de sus puntales guiándolo al éxito con la obtención de su único título en la historia, la Copa del Rey en 1919. Conoció también la Liga Española, en la que ejerció como jugador-entrenador del Arenas en sus primeros pasos por la competición.
Por aquella época se llevaba mucho lo de cumplir con la faceta de entrenar y jugar, algo que también solía hacer su paisano y colega José María Peña, con el que llegó a jugar al fútbol y a otros deportes, pues los hombres de aquellos años eran grandes atletas.

También fue árbitro tras retirarse como jugador, además de coger las riendas de una nueva selección de Euskadi en tiempos de la Guerra Civil. Pedro Vicente Saturnino Vallana Jeanguenat, también conocido como "Periko" Vallana, solamente jugaría para el equipo de su ciudad, en el que estuvo diecisiete años hasta que dejó el fútbol en 1929.

- Pedro nació el 29 de noviembre de 1897 en la localidad vizcaína de Algorta (Getxo). Era de ascendencia italiana y suiza, pero donde nació pació, y pronto sentiría en su sangre esa pasión de un deporte que hace poco habían trasladado a España los ingleses que iban llegando al país en sus escuadras marinas.
Pero a Vallana no solo le gustaba el fútbol. Como muchos muchachos de su época, el getxotarra practicaba otros deportes en los que también destacaba y que podía ejercitar en competiciones celebradas en Ibaiondo. Competía en atletismo en paralelo con su carrera como futbolista, llegando a marcar el récord de Vizcaya de los 100 metros lisos entre 1922 y 1928.
Pero aquí estamos paras hablar de fútbol más que de otra cosa. Vallana ingresó en un recién nacido Arenas de Getxo en 2012, cuando todavía era un adolescente. Se desempeñaba como defensa, una demarcación difícil de ocupar en una época en la que las delanteras eran bastante abultadas. No obstante, y pese a no tener un gran físico, el getxotarra sabía defender con éxito gracias a su sorprendente rapidez, la que le ayudaba a recuperar muchos balones. Tenía las típicas características de los jugadores vascos de aquella época, garra, pundonor y caballerosidad fuera y dentro de los terrenos de juego. En la zaga del conjunto rojinegro formó una gran sociedad con Domingo Careaga.

Su primer logro llegó con la Copa del  Rey de 1919. Aquel Arenas barrió por completo al Barça de los Paulino Alcántara, Lakatos, Garchitorena y Torralba. Con un incontestable 5-2, el equipo vizcaíno se hizo con el único ejemplar copero que figura en su historia. Pedro Vallana, con veintidós años de edad, fue titular en la zaga con los ya citados Peña y Careaga.

Y llegaron otra clase de éxitos. Figurando también como uno de los primeros componentes de la selección española, Vallana cumpliría su etapa internacional con doce apariciones, destacando aquella medalla de plata que obtuvo con el equipo olímpico en Amberes (Bélgica).
También participaría en los Juegos Olímpicos de París (1924) y Ámsterdam (1928). Cuando ya estaba en proyecto la creación de la Liga Española, Pedro dejaría de jugar para el combinado nacional. A partir de entonces viviría sus últimos partidos en activo con el equipo de su ciudad.

En aquel nuevo campeonato -hoy en día casi centenario- Vallana tuvo el honor de participar aunque fuera solamente en una ocasión. En aquella campaña 1928\29, el zaguero algorteño se haría con el cargo de entrenador, además de llegar a alinearse en una ocasión.

Vallana se vestiría de corto para afrontar un partido el 17 de febrero de 1929 contra el Europa barcelonés en Les Corts. Aquel día jugaría su último partido oficial con el Arenas de Getxo, en un dificultoso partido que acabaría con resultado por 5-2 para la escuadra catalana.
El ya veterano defensor no volvería a calzarse la zamarra rojinegra, al menos en competición oficial. A partir de entonces, y como siempre estuvo comprometido con el deporte, "Periko" se encargó de colaborar en las labores técnicas, como ya hizo con el húngaro István Plattkó Kopiletz, hermano de otros afamados deportistas como Ferenc y Károly Plattkó.

En 1929, el eterno capitán, entrenador y atleta de Algorta, había disfrutado de sus últimos duelos sobre los terrenos de juego con el único equipo al que representó en su carrera. Se dice que en su día compaginó sus labores como futbolista con el  arbitraje, una faceta en la que también gano un gran prestigio una vez colgadas las botas.

Hasta 1929, Pedro Vallana se mantuvo en activo llegando a conocer la Liga Española. 

- Con la llegada de la Guerra Civil en España, todos los torneos se paralizaron y solo quedaba la opción de jugar de manera amateur para el que no estuviese promovido por el ejército. En el País Vasco se creó la denominada "Selección de Euzkadi", aquella que hizo una gira por Europa con fines benéficos. Vallena fue el entrenador de dicho combinado euskaldún en el que jugaban los hermanos Regueiro, Iraragorri, Lángara y Gorostiza, entre otros.

Habiendo cobrado un sueldo de dos meses que ni los jugadores habían percibido, Pedro Vallana se instalaría definitivamente en la capital uruguaya de Montevideo. Allí trabajo como cronista deportivo y convivió con su familia hasta que falleció el 4 de julio de 1980.

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