- Claramente de más a menos empezó la carrera de un jugador que estaba llamado a hacer cosas importantes, pues salió de la cantera del F.C. Barcelona para después pasar por varios equipos con cada vez menor ambición deportiva. Llegó a debutar con el "Dream Team" de Johan Cruyff, conquistó dos Supercopas de España en los inicios de su trayectoria pasando por clubes como el Mallorca, Racing de Santander, Betis, Osasuna y Recreativo de Huelva entre otros tantos.
Óscar Arpón Ochoa nació el 9 de abril de 1975 en Calahorra (La Rioja). Creció en la cantera blaugrana viendo el mejor fútbol de la era moderna soñando con triunfar al lado de jugadores como Michael Laudrup, José Mari Bakero, Hristo Stoichkov, Andoni Zubizarreta y Ronald Koeman.
Él jugaba como centrocampista, muchas veces actuando en segunda línea por detrás de la zona atacante, sirviendo balones, repartiendo juego y luciendo un talento especial que en sus inicios llamaba mucho la atención. Goles llegó a marcar en Primera, pero fue en niveles más inferiores cuando pudo demostrar su mejor acierto de cara a la portería.
Empezó fuerte despuntando en la cantera blaugrana, pasando de jugar en el filial con Quique Costas a tener sus primeras oportunidades con el primer equipo, que a mediados de los noventa ya atisbaba el final de una era dorada con Johan Cruyff en el banquillo, que despidió el curso 94\95 con la Supercopa española.
Con aquel "Dream Team" debutaría en Primera División un 6 de mayo de 1995, es decir, hace hoy 29 años. Fue en un partido celebrado en Riazor contra el nuevo "Superdépor"de Arsenio Iglesias, que se impondría en su feudo por 1-0 ante la escuadra catalana. Arpón jugaría una parte entera.
En pleno tramo final de la campaña 94\95, el riojano contaría con dos partidos más en su debut como profesional, en partidos ante Logroñés y Celta de Vigo. Contra los últimos, Óscar jugaría de inicio y completaría todo el partido en el Nou Camp, choque que acabó con empate a uno.
A sus diecinueve años contaría con buenas ofertas para seguir compitiendo en la máxima categoría. Sin sitio en la poderosa plantilla blaugrana, el joven centrocampista se marcharía a Sevilla para formalizar su fichaje con el Real Betis, equipo para el que jugaría a partir de la temporada 1995\96.
Tras una campaña en la que gozó de mayor protagonismo, se incorporó al Racing de Santander en el verano de 1996 habiéndose estrenado ya como goleador con el equipo andaluz. Al conjunto santanderino llegaría como una apuesta de futuro, en una buena plantilla dirigida por Marcos Alonso.
En el Racing viviría sus mejores años como deportista, sumando un buen número de apariciones en Primera y anotando tres goles más a su cuenta particular. Después de dos buenos años en la escuadra sardinera, su siguiente destino sería un Mallorca bastante competitivo.
Con el conjunto balear actuaría como un simple recambio de banquillo. Como mallorquinista jugó solamente una temporada en la que el equipo se proclamó campeón de la Supercopa española, la segunda para el centrocampista riojano y su último título a nivel colectivo.
Arpón vivía sus últimos años en la alta competición. A finales de los noventa ficharía por un Osasuna de Segunda que con el de Calahorra en sus filas obtendría el ascenso a la máxima categoría. Con el equipo navarro jugaría diecinueve partidos más en la división de oro, en la que no volvería a competir hasta su llegada al Recreativo de Huelva, previo paso por el Poli Ejido.
Con el "Recre" viviría el amargo descenso de la campaña 2002\03, lo que supondría el declive de la carrera de Óscar jugando un año más para el conjunto onubense en la categoría de plata, abandonando la entidad en 2004 para fichar por el Salamanca.
Para el equipo del Helmántico jugaría durante tres campañas en las que bajó a Segunda B y logró el retorno a Segunda en 2007. Ya en su etapa como veterano, Arpón abandonaría Salamanca para viajar a tierras catalanas y así fichar por el Gimnàstic de Tarragona, por entonces en Segunda.
Óscar Arpón durante su corta estancia como jugador del Club Atlético Osasuna. |
- Compitió durante dos años para la escuadra tarraconense sin llegar a establecerse en la titularidad bajo las órdenes de César Ferrando. Ya con 33 años de edad, el medio riojano ficharía por la recién nacida Unión Deportiva Logroñés, con la que aguantó dos años más jugando en la categoría de bronce, hasta que en 2011 decidió fichar por el C.D. Ebro.
Jugando en Tercera despidió su carrera en 2012. Aquel que en los años noventa prometía una exitosa carrera profesional, cerraría su largo ciclo deportivo de casi veinte años con 141 partidos en Primera División en los que dejó cinco goles. Por poco tiempo, Arpón formó parte del "Dream Team" culé.
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