miércoles, 20 de marzo de 2019

¿Te acuerdas de José Mari Bakero?



- Julio Salinas, Alexanko, "Txiki" Begiristain, Andoni Zubizarreta, López Rekarte, Goikoetxea... Todos estos futbolistas mas José María Bakero Escudero sentaron las bases de un "Dream Team" que haría historia conducido por Johan Cruyff.
Aquel inolvidable equipo marcaría una época en los años noventa, conquistando la primera Copa de Europa para el Barça en 1992, y unos cuantos títulos que llegaron adornados por el buen fútbol de la marca "Cruyff". Bakero fue uno de sus mejores pupilos, un director de orquesta ganadora.

También hizo títulos con la Real Sociedad, incluso cuando aún no había cumplido la mayoría de edad. Con dos Ligas, una Copa y la Supercopa de España, el pequeño héroe navarro ofrecería su carta de presentación para llegar a un Barça ganador. Cabe reconocer su larga trayectoria internacional, representando a la selección española en treinta ocasiones y en las que hizo siete goles.

- Su gran pasión deportiva era la pelota vasca, hasta que encontró en el fútbol su salida profesional, una forma de divertirse ganando títulos y triunfando como nadie. De familia numerosa, los Bakero-Escudero estaban compuestos por los padres y once hermanos. Cinco de ellos se dedicaron al fútbol: Santi, Iñaki, José Javier, Jon y José María. Tampoco hay que olvidarse de la internacional Itziar Bakero, quien siguió el paso de los varones demostrando que el fútbol no es solamente cosa de chicos.
José Marí nació el 11 de febrero de 1963 en Goizueta (Navarra). Fue campeón pelotari de Gipuzkoa cuando tenía doce años y repitió al año siguiente. Sin embargo, fueron sus hermanos los culpables de que José Mari acabase coleccionando aún más títulos como futbolista. De esta manera, con quince años ingresó en la cantera de la Real Sociedad.
No cuesta mucho recordar a este as del balompié. Era menudo y melenudo, una especie de Rambo en miniatura al que le gustaba jugar siempre en ataque. Desde pequeño se formó como delantero, pero poco a poco fue desplazándose a la posición de mediapunta o volante, demostrando unas maneras tremendas para triunfar en el deporte rey. Goleador como ninguno, Bakero hacía goles de todas las maneras posibles, aunque llamaba la atención su manera de cabecear, potente y muy precisa, a la para que espectacular. Tenía un buen manejo del balón y era buen asistente.

Lo suyo fue llegar y besar el Santo. Bakero dio el salto al primer equipo txuriurdin justo para conquistar los primeros títulos de su carrera. Con diecisiete años y de la mano de Ormaetxea, el de Goizueta debutaría en Primera un 6 de septiembre de 1980, en un partido frente al Valencia en el Luis Casanova que concluyó con victoria ché por 3-2.

En su primer año como txuriurdin no pudo celebrar goles, aunque sí título. José Mari participaría en 27 partidos de aquella Liga 80\81 que acabaría con el alirón donostiarra. Sin la necesidad de sus goles, al año siguiente se repitió título mientras él cumplía su Servicio Militar, pudiendo vestirse de corto en tan solo dos ocasiones.
El primer gol en la máxima categoría lo haría el 23 de enero de 1983, en un partido que ayudaría para ganar al Racing de Santander en Atotxa (2-0). Haría tres goles más en Liga aquel año de la Supercopa, sin olvidar su diana en la Liga de Campeones ante el Sporting de Lisboa.

Bakero continuó en la Real Sociedad hasta 1988, llevándose el título de Copa como recuerdo para después hartarse a ganar títulos como blaugrana. El F.C. Barcelona contaría con los servicios del atacante navarro cuando aún tenía 25 años, al que aún le quedaba mucho fútbol en sus botas.

Con el Barcelona sería otro cantar. Sería uno de los fieles guerreros del "Dream Team" de Cruyff, aquel espectacular equipo culé en el que aparte de él, estaban los Michael Laudrup, Ronald Koeman, Hristo Stoichkov y Pep Guardiola, entre otros.
Fueron años dorados para la entidad barcelonesa, y también para José María Bakero, que a sus logros personales con la Real tuvo que añadir cuatro títulos de Liga, dos Copas del Rey, dos Recopas, cuatro Supercopas de España, una europea y la inolvidable Copa de Europa conquistada en Wembley (1992).

Hasta 1997 estuvo jugando para el F.C. Barcelona, cumpliendo con una novena temporada que derivaría en su adiós como azulgrana, aunque aún no como futbolista. Posteriormente se trasladaría a México para jugar en los Tiburones Rojos de Veracruz, donde compitió durante unos meses antes de colgar las botas y convertirse en entrenador.

José Mari Bakero celebra uno de sus muchos tantos conseguidos para el F.C. Barcelona.

- En total, Bakero participó en 483 partidos de liga e hizo 139 goles. Habiendo jugado para Real Sociedad y Barcelona, el pequeño héroe de Wembley quiso donar su talento a su hijo Jon, quien trata de emular a su padre en la Major League Soccer norteamericana.

Como internacional cumplió un papel de treinta partidos y siete goles. José María Bakero acudió a dos ediciones de la Copa del Mundo, la primera en Italia 90 y la segunda en Estados Unidos 94. Así se completa la carrera de uno de los más exitosos futbolistas vascos en la historia del fútbol, la de aquel chaval que dejó la pelota vasca para coger la pelota balompédica.

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