¿Te acuerdas de Julen Guerrero?

- Uno de los jugadores que más me entusiasmaron durante los años noventa es Julen Guerrero López, cuya carrera empezó siendo estelar y acabó de la manera más extraña e inexplicable. Todo se achacaba a problemas personales y algunas que otras historias de vestuario.
Sin entrar en esos polémicos asuntos, recordemos a este gran futbolista como bien merece, pues es uno de los mejores futbolistas que se han visto en el equipo rojiblanco de los últimos tiempos. Nunca ha defendido ninguna camiseta que no fuera la del Athletic, a excepción de la española, pues jugó con la selección nacional dos Mundiales y una Eurocopa.

Actualmente podréis verle en los banquillos, como asistente técnico o formador de otros jóvenes talentos que sueñan con vivir los inicios de este crack noventero. Como Julen hubo pocos, un jugador discreto, implicado, un deportista y el "rey de las nenas", pues no debemos obviar que este hombre levantó muchas pasiones entre el público femenino.

- Le llamaban "El Rey León", "La Perla de Lezama" o "Peter Pan", pero siempre se le recordará por ser él, Julen Guerrero. Este león de rubia melena, ojos claros y rostro fotogénico nació el 7 de enero de 1974 en Portugalete (Bizkaia). Da igual que cualquier aficionado sea del Celta, Atlético, Valencia, Barça, Real Madrid, Real Sociedad o del Real Sporting Quintalajo de la Colmera. Cualquier aficionado que no fuera del Athletic, supo apreciar el talento de este mediapunta que se inició en Lezama desde niño.
Julen era un futbolista especial, un mediapunta capaz de hacer muchos goles, asistir, generar juego, tirar faltas, organizar y remontar un partido con resultado adverso por 0-3. Esto último no es ninguna falacia, pues en el recuerdo quedará aquella remontada rojiblanca cuando el Osasuna tenía ganado el partido por semejante resultado. Guerrero, que llevaba un tiempo desconectado, ayudó en una histórica remontada que acabó con 4-3 para los bilbaínos.
Estudió en el Colegio Santa María de la villa portugaluja. Posiblemente allí asombraría a muchos con esa técnica que posteriormente trasladaría a los mejores estadios de fútbol, puliéndose poco a poco en esa fabulosa cantera vizcaína que ha cuidado de tantos talentos vascos nos han sorprendido desde que el balompié irrumpió en el universo. Desde los ocho años se acostumbró a soñar en Lezama, pasando con gran éxito por todas las categorías hasta el momento de su inclusión en el equipo filial. También su hermano José Félix Guerrero crecería en la cantera rojiblanca y acabaría jugando en Primera, aunque no lo haría con el Athletic.

Julen Guerrero ya debutaría a comienzos de los noventa en Segunda División con el Bilbao Athletic. De la mano de Blas Ziarreta, ese chaval de aspecto angelical, aparecería en el estadio de San Lazaro de forma fulgurante, anotando un hat-trick que le daría la victoria al equipo rojiblanco frente al Compostela.

Así de exitosos fueron los inicios de la cotizada perla de Lezama, que ya en el curso 92\93 se prepararía para debutar en Primera a los dieciocho años. Apareció en el primer equipo junto a su eterno compañero Juanjo Valencia, y ambos debutarían con Jupp Heynckes en San Mamés en la primera jornada del campeonato, el 6 de septiembre de 1992.
El Athletic recibía la visita del Cádiz, un rival incómodo que ya no contaba con Mágico González y que ya nos descubría al gran Kiko Narváez. Ziganda y Valverde serían los autores de los goles vascos, los cuales sirvieron para vencer por 2-1 con un Guerrero que ya daba guerra.

Y empezaron a llegar los goles. En la tercera jornada de liga, Julen haría uno de los cuatro que el Athletic le endosó al Rayo en su visita a la Catedral bilbaína. Luego llegarían los goles a pares, hasta completar en su primer año como profesional unos registros de 10 goles en 37 partidos.

Guerrero ya era una sensación del fútbol español. Era el camino del gol y el propio gol, como bien demostró en la siguiente temporada haciendo dieciocho goles que le permitirían viajar a la Copa del Mundo de los Estados Unidos como una de las principales figuras de Javier Clemente.
A partir de mediados de los noventa, el eterno "ocho rojiblanco" asumiría los galones de capitanear al equipo de su ciudad, convirtiéndose de repente en uno de los mejores futbolistas del panorama europeo que empezaría a contar con esas otras "novias" que azotan la cabeza de cualquier futbolista.

Al portugalujo no le comieron la cabeza. Contó con serias ofertas para abandonar el Athletic de Bilbao, que el propio jugador espantaría como si fueran moscas. Los intereses más reconocidos fueron los de Real Madrid y Milan. pero el "One Club Man" nunca se vio fuera del equipo bilbaíno, no mientras pudiese seguir jugando al fútbol.

Las ofertas no le cambiaron, pero algo extraño hubo para que este increíble talento acabase perdiendo el protagonismo en la escuadra de los leones. Los inicios del nuevo milenio no le sentaron bien a Julen, que poco a poco perdería gol y esa gracia futbolera que tanto había lucido por la Liga Española.

La carrera de Julen fue en claro declive a partir del nuevo milenio, llegando a retirase con 31 años de edad.

- El de Portugalete pasaría de jugar siempre a no jugar nada, llegando a comer pipas en la grada con Luis Fernández de entrenador, lo que ya empezaba a oler como una pronta despedida. En 2006, y con 31 años de edad, Guerrero colgaría las botas tras tres lustros defendiendo la zamarra de su Athletic, completando unos números de 101 goles en 371 partidos.

Aquel buen hombre con mucho fútbol y una modestia muy notable, también representaría a la selección española en 41 partidos. Hizo 13 goles como internacional y acudió a los Mundiales de USA 94 y Francia 98, así como a la Eurocopa de Inglaterra 1996.