De cerca: Iñaki Toledo.

- Nunca pasó más allá de competir en Segunda B, por ello tiene que compaginar el fútbol con otras labores, porque de lo que hay no se puede vivir. Sin embargo reconoce diariamente que el fútbol le encanta, y por ello entrena a chavales cuando sus obligaciones se lo permiten.
Iñaki Toledo Ayensa es un jugador de banda que pasó de formarse en la cantera de Calahorra y Osasuna ha jugar para equipos modesto, llegando a irse muy lejos para fichar por el Alcoyano y en su retorno seguir en activo compitiendo para River Ebro, Alfaro, S.D. Logroñés, vuelta al Calahorra y actualmente en Logroño otra vez. Muchos a su edad ya hubieran dejado el fútbol, él por el momento no.

Este extremo que está a punto de hacer 32 años nació en Calahorra (La Rioja), el 27 de abril de 1987. Cumple los años el mismo día que un servidor, así que la semana que viene le deseo un feliz día de cumpleaños y que siga jugando al fútbol hasta que el cuerpo aguante.

Así es la vida de aquel futbolista que sueña por el fútbol y no puede llegar más lejos de lo que realmente desea. Mientras unos no tienen mayor preocupación que acabar de entrenar y llegar a casa para jugar a la "Play", otros tienen que ponerse las pilas y fichar en su empresa para conservar el puesto de trabajo. Ese es el día a día de Iñaki, que además de futbolista es fresador de control numérico.
Siendo pequeño empezó a entrenar en la escuela de fútbol de Calahorra. Allí aprendió a ser extremo, aunque a veces ha tenido que jugar como interior o incluso lateral defensor. Al igual que yo, es zurdo, así que le entiendo perfectamente, pues los zurdos escasean y son un perfecto comodín para el entrenador.

Toledo es más de jugar arriba, cuanto más cerca de la portería rival mejor. También puede actuar como mediapunta, y además ha demostrado que tiene gol en sus pasos por Tercera y Segunda División B. Eso sí, primero tuvo que empezar por formarse en la cantera del Club Atlético Osasuna.

En Pamplona estuvo cinco años y después recaló en el River Ega, de donde posteriormente pasaría al Tudelano. Entonces llegaría el momento de aceptar un reto más importante en su carrera, habiendo destacado con el conjunto navarro en Tercera para llamar la atención del Alcoyano.
Se trasladó a Alicante en 2008 para fichar por la entidad de El Collao, donde se pondría a las órdenes del mismísimo José Bordalás, actual entrenador del Getafe. En la plantilla coincidiría con jugadores de nivel contrastado como César Negredo, Sergio Mora, Patri, Linares y el veterano guaradameta Fernando Maestro. Muchos de ellos ya habían competido en Segunda, algunos incluso en Primera.

Arropado por el nivel de la plantilla, Toledo supo acoplarse al equipo y jugó por vez primera en la categoría de bronce española, en un partido frente al Villarreal B que acabó con victoria de los blanquiazules por 1-0. El riojano tendría poco más de un minuto de juego.

En su experiencia como jugador del Alcoyano solamente pudo jugar un partido como titular en un partido con el Promesas como rival, aunque no llegaría a terminar el encuentro al ser sustituido a falta de un cuarto de hora. Aún así, Iñaki tuvo tiempo a marcar su primer gol en la categoría, tanto que serviría para sentenciar un partido en la visita a del Orihuela a Alcoy (4-1).

Para Toledo no se acabaría ahí la experiencia de jugar en Segunda B, ya que posteriormente viviría sus mejores años como futbolista muy cerca de casa. Regresó a tierras riojanas tras pasar por el River Ebro, Calahorra y Alfaro, fichando por la S.D. Logroñés en el verano de 2012.
Con un mito del extinto C.D. Logroñés como Agustín Abadía, Iñaki Toledo tendría el honor de ser uno de sus pupilos predilectos. El de Binéfar le permitiría participar al atacante en 31 partidos de la campaña 2012\13, en los que el riojano respondería con cinco goles y un magnífico rendimiento.

Iñaki Toledo estuvo de ida y vuelta en equipos como el River Ebro, Logroñés y Calahorra.

- Aún jugaría un año más para el Logroñés en Segunda B, manteniéndose en la titularidad con 33 apariciones en una mala campaña que terminaría con descenso a Tercera. Pese a ello, Toledo se llevaría muy buen recuerdo de su estancia en la entidad de Las Gaunas, de la que saldría tras aquel descenso para retornar al C.D. Calahorra.

La carrera de este punta riojano sigue siendo de idas y vueltas, pues volvió a fichar por el Logroñés en 2018. Ahora solo piensa en retornar a Segunda B, aunque no olvida que en la vida hay otras obligaciones y que ya se halla en el tramo final de su carrera deportiva.