¿Te acuerdas de Iñaki Ocenda?

- Formó parte de un Racing de Primera en el que no llegó a convencer, y eso que sus inicios fueron bastante prometedores. Con el Alavés vivió etapas muy diferentes, de buscar el ascenso a la máxima categoría a jugar en la Segunda B. Tampoco estuvo mal su paso por el Sestao Sport Club, con el que también compitió en la categoría de plata.

Su nombre es Ignacio Moraza Ruiz de Ocenda (Iñaki Ocenda). Nació el 25 de julio de 1960 en Vitoria-Gasteiz (Araba). Dio sus primeros pasos como futbolista jugando para el C.D. Vitoria, de donde pasaría a fichar por el Deportivo Alavés sin cumplir aún la mayoría de edad.
Finales de la década de los setenta. Ocenda destacó en las categorías menores del "Glorioso" por ser un mediocampista de contención con mucha visión de juego, técnico y bastante bregador. Sus evoluciones en la cantera alavesista le permitirían subir al primer equipo a los veinte años, en 1980.

Coincidió en el vestuario del conjunto vitoriano con hombres de la talla de Juan Señor, Andoni Zubizarreta e Ibon Amuchastegui, dirigidos por el técnico García de Andoin. Éste sería quien le concedería el honor de debutar con la primera plantilla en competición.

Su primer partido como alavesista llegaría en la primera jornada del curso 1980\81, en un duelo ante el Getafe Deportivo que acabaría con victoria por 0-2 favorable a los vascos, ganadores en su visita al barrio de la capital española. Ocenda jugaría todo el partido.
En su estreno profesional, el joven gasteiztarra cumpliría con 34  partidos y 5 goles, pero al año siguiente no podría pasar de los tres partidos por tener que cumplir el servicio militar. Al año siguiente se reincorporó al Alavés, con el que no podría impedir el descenso a Segunda B tras una nefasta temporada en la que jugó 23 partidos a bajo nivel.

Compitió en Segunda B durante dos campañas más con el club babazorro, fichando por el Sestao S.C. en la campaña 1985\86, por entonces en Segunda División. Allí coincidiría con un jovencísimo Ernesto Valverde, considerado por entonces como una gran promesa del fútbol vasco.

Hasta Sestao se habían trasladado ojeadores del Racing de Santander, con el objeto de supervisar al talento cacereño. No obstante, acabaron fijándose más en Iñaki, a quien ficharon por siete millones de peseta y un partido amistoso entre los dos equipos.
Precisamente fue después de ese amistoso cuando la plantilla racinguista casi pierde la vida. Viajaban en un autobús con destino a Santander que acabó colisionando con un camión. Por fortuna, no hubo que lamentar ningún fallecimiento, aunque sí hubo heridos graves.

Ya recuperado de aquel susto, Ocenda se preparó para debutar en Primera División. Fue en un partido celebrado en el Camp Nou ante el Barcelona, el 30 de agosto de 1986. El conjunto montañés, con Ocenda en el medio del campo, ofreció una buena imagen pero sucumbió ante la escuadra barcelonista, que en aquella primera jornada se impondría por 2-0.

Dos jornadas después de su debut en la categoría, el medio vitoriano celebraría su primer y único gol en Primera. No serviría de mucho, ya que el Racing de Santander acabaría perdiendo en El Sardinero ante un Mallorca muy bien plantado (1-2).
Aquella temporada fue un desastre. El equipo, con Maguregui en el banquillo, acabaría perdiendo la categoría ocupando la penúltima plaza de la tabla. Por su parte, Ocenda había disputado dieciocho partidos en lo que fue su única excursión por la máxima categoría española.

Ocenda jugaría u año más en Segunda con el Racing, en una mala temporada interrumpida por las lesiones. Su bajón de forma haría que la directiva se deshiciera del jugador, que en el verano de 1988 haría las maletas para fichar por el Ceuta, donde estuvo tres temporadas compitiendo en Segunda B.

Iñaki Ocenda conoció la Primera División como jugador del Racing, equipo por el que fichó tras jugar para el Sestao.

- Terminó su carrera donde la empezó, jugando en su ciudad natal con el Deportivo Alavés. Aguantó jugando al fútbol hasta los 31 años, participando en trece partidos de la categoría de bronce acosado por las lesiones. Es por esta razón por lo que Iñaki Ocenda acabaría dejando el fútbol una vez concluido el curso 1991\92.

Pero Ocenda no abandonaría el Alavés, ya que a partir de entonces iniciaría una nueva etapa como preparador. Además de trabajar en varios clubes como ayudante técnico, también se atrevió a coger las riendas de equipos como el Aurrera de Vitoria, Mirandés y el propio Deportivo Alavés.