De cerca: Yeray Álvarez.

- Todos reconocemos a Yeray como uno de los casos más flagrantes de lucha y superación, un auténtico león que en sus firmes primeros pasos por el fútbol profesional tuvo que lidiar con una de las enfermedades más terribles para la humanidad.
Hoy sabemos que este defensor es todo un ganador. Ganó al cáncer y se ganó el derecho a seguir jugando al fútbol, en uno de los mejores clubes en la historia del fútbol español. Desde septiembre de 2016 compite en Primera División, habiendo únicamente para el club de su vida.

Yeray Álvarez López nació el 24 de enero de 1995 en Barakaldo (Bizkaia ). Allí creció y dio sus primeros pasos como futbolista jugando en el Colegio La Inmaculada de Barakaldo, de donde pasó a jugar para el Amets, donde estuvo jugando varios años.

El siguiente paso fue ingresar en la cantera del Barakaldo Club de Fútbol, club que le dio formación durante dos temporadas. Yeray se fue creando como un magnífico defensa central, con buena planta, bregador y muy serio en los marcajes al rival.
En 2007 se fue al Danok Bat, uno de los equipos más reconocidos de Bizkaia, el que le abriría las puertas del Athletic Club. En Lezama empezaría a jugar desde las secciones menores, formando parte de una brillante generación de jóvenes promesas como Álex Remiro, Iriondo, Urdabarrena, Santamaría y Unai López entre otros.

Llegó a la final de la Copa del Rey Juvenil rindiendo a un nivel espectacular y posteriormente jugaría para el Baskonia. Para el club de Basauri jugaría 26 partidos, ayudando al equipo en la promoción de ascenso a Segunda B. Finalmente no hubo suerte.

Yeray volvió al Athletic para entrar a formar parte del equipo filial. Jugó bajo la supervisión de José Ángel Ziganda, pero no podría debutar en Segunda B hasta la campaña 2014\15, en la que cumplió con treinta partidos y un gol. Por si fuera poco, el Bilbao Athletic consiguió ascender a Segunda División con el baracaldés comandando la defensa.
Contó para Ernesto Valverde en alguna sesión de entrenamiento con el primer equipo, incluso llegaría a realizar la pretemporada. No obstante, el zaguero seguiría adquiriendo experiencia en la categoría de plata, en la que el filial rojiblanco no podría mantener el tipo.

Valverde le haría debutar en Primera tras un partido en las fases clasificatorias de la UEFA Europa League. Después de una derrota ante el Sassuolo por 3-0, Yeray Álvarez debutaría en la máxima categoría el 18 de septiembre de 2016. Fue en un partido en San Mamés ante el Valencia, en el que los vascos se impusieron por 2-1. El barakaldotarra tuvo sus primeros minutos en el fútbol profesional.

Todo pintaba bien. Yeray continuaría sumando más partidos con el primer equipo rojiblanco hasta que el 23 de diciembre de 2016 se comunicó en una rueda de prensa que al jugador se le había detectado un tumor en su testículo derecho.
Un mes después recibiría el alta médica y jugaría un partido frente al Barcelona, precisamente en un día reconocido como el Día Mundial contra el Cáncer (4 de febrero). El de Barakaldo acabaría la temporada 2016\17 con normalidad, hasta que otra vez saltarían las alarmas en el mes de junio, cuando se le diagnosticó una adenopatía. El jugador se tuvo que someter a una quimioterapia.

El vestuario unido apoyó a su compañero. Todos se raparon la cabeza para ser como Yeray, y éste pasaría unos meses muy duros en tratamiento, hasta que al fin pudo ganar el título más importante de su vida en la lucha contra el cáncer. El zaguero ganaría por goleada y reaparecería en los terrenos de juego, otra vez un 4 de febrero, en una derrota por 2-0 ante el Girona.

Tras superar un largo cáncer, Yeray pudo retornar a los terrenos de juego para seguir jugando con su Athletic.

- La vida de Yeray transcurrió con normalidad a partir de entonces. Continuó sumando partidos para su Athletic y pudo participar con la selección española en partidos preparatorios de cara a la Copa del Mundo de Rusia 2018, competición a la que finalmente no acudió.

No ha vuelto a ocurrir nada extraño. El defensor es uno de los zagueros más en forma de un Athletic y empezó a contar para Eduardo Berizzo desde el principio, y posteriormente de su sustituto en el banquillo, Gaizka Garitano. Si nada lo impide, Yeray Álvarez superará los cien partidos en Primera con el equipo de su vida, un Athletic que fue testigo de sus buenos y malos momentos.